Mi objetivo es que vivas tu día al máximo y que lo revivas siempre que quieras con las fotografías.
TU HISTORIA DE AMOR
Cualquier excusa es buena para pasar un rato en pareja y dedicarse un rato con una sesión de fotos de pareja. Que no te vas a casar pero te apetece tener fotos de los dos, perfecto. Que quieres pedirle matrimonio e inmortalizar el momento, precioso. Que ya te has casado y quieres celebrar el aniversario con unas fotos, una gran idea. Que ya tienes hijos y necesitáis un ratito para estar solos y desconectar de la rutina. Una sesión de fotos es mucho más que unas fotos, es pasar en pareja un rato bonito y relajado, dedicarse a estar cariñoso con el otro es el objetivo.
UN DÍA PARA EL RECUERDO
El día de la boda es un único día, son unas horas en las que vas a vivir unas emociones intensas. Tan intensas que tendrás ganas de exprimir cada segundo de ese día, pero al final el día pasa, se acaban las horas de ese día. ¿Y qué nos queda? Nos quedan unos recuerdos maravillosos, historias y anécdotas de lo sucedido. Todo ello en forma de fotografías a las que recurrir para refrescar esos preciosos momentos.
RECUERDOS EN PAPEL
Tengo una serie de fotos de mi infancia grabadas a fuego, pequeños tesoros con mis abuelos, con mis padres o mi hermano. Fotos que recuerdo muy bien porque están en los álbumes del salón de casa y a las que he acudido mil y una veces. Esas pocas fotos elegidas, de cada evento familiar, son pequeños tesoros con los que viajo a esos momentos. Es la magia que tienen las fotos en papel.